El Terminador 0074

El Terminador 0074

Ucrania – Otra Gran Manipulación

Prosiguen las operaciones militares en Ucrania pero hay dos narrativas radicalmente opuestas, una en los medios occidentales y otra en los medios rusos.

Las dos versiones no sólo difieren en la descripción de las operaciones, también describen de manera muy diferente los objetivos mismos de esta guerra.

En Occidente, el público está convencido de que el ejército ruso tiene enormes problemas logísticos, de que no logra disponer del combustible necesario para sus tanques y de que los aviones rusos atacan indiscriminadamente blancos civiles y militares, destruyendo ciegamente ciudades enteras.

Los medios occidentales afirman que el dictador Putin no parará hasta arrasar Kiev y matar al presidente electo Zelenski, que para él Ucrania cometió el crimen de haber optado por la democracia en 2014 en vez de integrarse a una nueva Unión Soviética y que ha decidido sembrar la muerte y la desolación entre la población civil mientras que sus propios soldados caen como moscas.

En Rusia, por el contrario, la gente piensa que los combates se circunscriben sólo a zonas precisas:

el Donbass, la costa del Mar de Azov y los blancos militares en todo el resto del país…

Por supuesto, hay bajas que lamentar pero no una hecatombe.

La opinión pública rusa ve con estupor como los antiguos aliados de la Gran Guerra Patria (así designan los rusos lo que Occidente llama la Segunda Guerra Mundial) apoyan a los «banderistas» – los neonazis ucranianos – y ansía que estos sean neutralizados para que vuelva la paz.

Como ruido de fondo, Occidente ha iniciado una guerra económica y financiera contra Rusia.

La Mentira – La Principal Arma de Guerra en Ucrania

El mundo teme que la humanidad esté al borde de un conflicto militar de grandes dimensiones:

¿terminal…?

Hoy no solo asistimos a una extrema ideologización y parcialidad en la cobertura de los sucesos en Ucrania, sino que las mentiras y la manipulación del imaginario colectivo se ven potenciados en las redes sociales y llevan a la hipertrofia de una masa informativa fuera de todo control y verificación.

Una vez más, los medios de comunicación – incluyendo las redes sociales – actuaron de forma alevosa para generar un conflicto que sólo puede beneficiar a los vendedores de armas, las petroleras trasnacionales, que son los que han atizado el conflicto.

La verdad es la primera víctima de la guerra, decía el griego Esquilo hace más de 2.500 años.

Hoy sabemos que la mentira es un arma de guerra.

Los medios hegemónicos instalan la guerra en el imaginario colectivo, cuando lo más sensato sería lamentar el conflicto por lo que éste implica en términos de sufrimiento humano y destrucción material e insistir no en la competencia por demostrar quién es el más fuerte, sino en la necesidad de una solución mediante el diálogo.

Es lo que llaman la guerra híbrida,

la mentira como arma y la verdad como víctima…

La cobertura de los principales medios de comunicación sobre la crisis de Ucrania es defectuosa, además de claramente racista y llena de prejuicios, repetidores de los mantras rusofóbicos fabricados en Washington para instrumentalizar la guerra de guerrillas geopolítica e ideológica de las «fuerzas del bien», la civilización occidental, contra la «fuerza del mal»

Cómo Navegar en este Tiempo de Transición y el Nacimiento de una Nueva Era

Estamos en medio de la muerte de una vieja era y el nacimiento de una nueva.

Lo que suceda a continuación es de vital importancia porque será la semilla del próximo ciclo de este drama que llamamos Planeta Tierra. Por lo tanto, debemos comprender qué significa realmente estar en un «período transitorio» y cómo nos afecta a nivel individual y colectivo.

La gente me ha preguntado muchas veces de qué se trata este «Tiempo de Transición».

He visto a más y más personas usar esta frase para describir estos tiempos evolutivos, y todos tienen sus ideas al respecto. Aprendí por primera vez sobre el «Tiempo de transición» en 2006, cuando estudié el cristianismo esotérico y las enseñanzas del 4º camino de Boris Mouravieff en su trilogía Gnosis.

Los lectores veteranos de mi trabajo saben que he citado extensamente estos libros en los artículos y ensayos que escribí a lo largo de los años.

Mouravieff escribe sobre el «Tiempo de Transición» en Gnosis, describiendo el «cambio de las eras».

De acuerdo con la Tradición Cristiana Esotérica (que no debe confundirse con la religión cristiana dogmática principal / Iglesia Católica que se ha convertido,

distorsionado

corrompido (secuestrado por fuerzas hostiles ocultas)

convirtió la religión en un medio para el control social y la cosecha de almas),

… la evolución humana, después de un largo período prehistórico, continúa en una sucesión de tres ciclos:

el Ciclo del Padre, que la historia conoce sólo de manera incompleta

el Ciclo del Hijo, que ahora llega a su fin

por último, el Ciclo del Espíritu Santo, al que ahora nosestamos acercando…

El Tiempo de Transición en el que nos encontramos actualmente es el período de transición entre el Ciclo del Hijo y el Ciclo del Espíritu Santo.

Es una etapa crítica en la evolución esotérica y espiritual de la humanidad. No se garantiza una transición exitosa.

Es una oportunidad, y depende de una cierta fracción de la humanidad (con potencial del alma) para participar conscientemente en la Gran Obra (esotérica) para individualizarse y espiritualizarse, para anclar la Fuerza Divina (Espíritu Santo) y ayudar a transmutar el mundo/tierra. sacándolo de las garras de las fuerzas hostiles anti-Divinas.

Un fracaso de este proceso evolutivo durante este Tiempo de Transición resultará en una destrucción catastrófica, similar a lo que sucedió con las civilizaciones antiguas en ciclos anteriores como la Atlántida y simbolizada en el diluvio bíblico/arca de Noé.

La destrucción sería el resultado de que la humanidad no aprendiera sus lecciones y la necesidad de repetir el ciclo, es decir, lo Divino «pulsando el botón de reseteo/reinicio».

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